26 marzo 2015

Camino hacia la Pascua en el Mater Purissima

Os ofrecemos una reflexión de la mañana preparado ayer por alumnos de 3º de  ESO con su tutora Laura Mediano. A lo largo de la cuaresma hemos ido descubriendo distintos rostros de Jesús. 


AGRADECIMIENTO

¡BUENOS DÍAS! Esta mañana te invitamos a hacer un sencillo ejercicio. A continuación citaremos una serie de palabras. Te proponemos que cierres los ojos e imagines el rostro de alguien que te recuerde a esa palabra. Recuerda cómo es su mirada, cuáles son sus gestos, el tono de su voz,… Siempre que te sea posible, procura pensar en personas diferentes para cada palabra. Comenzamos el ejercicio, recuerda, cierra los ojos… 

TERNURA
COMPASIÓN 
MISERICORDIA
ALEGRÍA 
GENEROSIDAD 
COMPRENSIÓN 
AMOR 
ACOGIDA

 Seguro que ahora tienes tu mente y sobre todo tu corazón lleno de personas con quien compartes la vida. Personas que hacen que tu vida tenga sentido, personas que en los momentos difíciles lo hacen todo más llevadero, personas que disfrutan con tu felicidad y celebran tus triunfos, personas que sacan siempre lo mejor de ti, aun cuando todo se vuelve gris, personas que son padre, madre, hermano, familia, amigo, compañero,… todos cómplices que comparten junto a ti este largo viaje que es vivir, sentir, crecer, luchar, amar,…
 Ahora te proponemos un segundo ejercicio. De nuevo cierra los ojos y recuerda otra vez esos rostros. Uno por uno pásalos de tu mente a tu corazón y da las gracias por contar con ellos en tu vida. Agradece todo lo bueno que hay en ellos y todo lo que se te ofrece al compartir el día a día. Uno por uno, da las gracias. Pon palabras y gestos a tu agradecimiento. (Música)

Pero, ¿quién está realmente detrás de cada uno de estos rostros? ¿Quién está detrás de mi propio rostro? Para los creyentes, contemplar al otro es contemplar a Dios. Dios se nos da con ternura, compasión, misericordia, alegría, generosidad, comprensión, amor, acogida, ¡y tantas cosas más! cuando nos relacionamos con los otros. Recuerda que en esta Cuaresma hemos construido el rostro de Jesús con la suma de todos nuestros rostros, ya que en definitiva, todos le trasparentamos, o al menos a eso estamos llamados. Te invitamos a que repitas este ejercicio muchos otros días, por ejemplo, antes de dormir, o cuando estés desanimado. Seguro que te ayuda a ser agradecido y a poner nombre a muchas cosas que en día a día pasan a veces desapercibidas.

Colegio Mater Purissima. Madrid

No hay comentarios: