Carta nº 228 Febrero 1902
“Poniendo de nuestra parte, sea lo que Dios quiera”
Oír
esta perla en tiempo de resurrección es diferente que escucharla en otro
tiempo. Dios nos vuelve a recordar su resurrección. Nuestro corazón vuelve a
recuperar la ilusión después de la pasión. Y nos volvemos a retar: algo tenemos
que hacer diferente, algo tendremos que poner de nuestra parte para que se note
que somos discípulos y testigos del que ha resucitado. Algo parecido algo que
hicieron esos primeros discípulos, desorientados y encontrados.
¡¡
Feliz Pascua!! Que Dios nos de la luz para ir descubriendo qué es lo que
podemos poner de nuestra parte. Y después de hacer todo lo que podamos... sea
lo que Dios quiera.
¡¡Feliz Pascua!!
Que el duro camino hasta la próxima Pascua sea el que nos haya hecho crecer un poco.
Pongamos
de nuestra parte todo lo que somos. De lo demás ya se encarga Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario