La Comunidad Internacional del Juniorado de Madrid comenzó su andadura
oficialmente ayer, 12 de septiembre, una fecha significativa para la
Iglesia porque celebramos el Dulce Nombre de María. Esta nueva comunidad
está formada por Mª Carmen Jiménez, Aparecida Ramos, Rita Consolata
José, Sofía Langoni, Gemma Torres y Silvia Rozas. Las seis ya están
viviendo en un lugar muy sencillo, el barrio de la Ventilla de Madrid, y
entre personas sencillas que caminan juntas con el desafío de abrirse a
la realidad de la inmigración.
Ayer, la comunidad organizó una breve oración en la casa e invitó a las
Hijas de Jesús de Madrid a unir esta inauguración a la vigilia de
oración que la Iglesia convocó ayer para rezar por los migrantes y
refugiados. Muchas Hijas de Jesús participaron después en el Seminario
Conciliar de Madrid con toda la Iglesia que peregrina en esta diócesis.
Tras esa acogida y visita a la Casa Juniorado, la oración giró entorno a
la flauta de caña que el Señor va modelando para transmitir una hermosa
melodía. Un signo que se inserta en la realidad de la vida, sobre la
mesa de comedor-comunidad y rodeado de otros signos que recuerdan la
compañía y ánimo de tantas Hijas de Jesús que se han ido haciendo
presentes.
Mañana lunes, toda la comunidad viajará a Roma para participar en el Encuentro Mundial de los Jóvenes religiosos y religiosas.
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