El padre Ángel está dolido. Observa atónito
cómo la nueva alcaldesa 'popular' de Recas (Toledo) interpreta a la
inversa el milagro de los panes y los peces. Acaba de llegar al
Ayuntamiento y una de las primeras medidas que quiere tomar es cerrar el
comedor social que alimenta a 68 niños del pueblo, todos ellos hijos de
inmigrantes.
La historia es, en boca de Ángel, presidente de la ONG Mensajeros de la Paz, la siguiente. "Hace ocho o 10 días, cuando la nueva alcaldesa (Laura Fernández, del PP)
tomó posesión del cargo, me dijo que el comedor podría seguir pero sólo
atendiendo a niños empadronados". A pesar de la sorpresa inicial, el
padre Ángel fue claro en su respuesta. La misma que repite tajante por
teléfono a EL MUNDO: "No voy a pedirle los papeles a un niño para darle
un plato de comida. Con el hambre de la gente no se juega y, menos aún,
con el de los niños".
No hay comentarios:
Publicar un comentario