Tiene un cuerpo menudo y un corazón grande en el que habita África, un
continente que ha marcado un antes y un después en la vida de la
misionera religiosa burgalesa Presentación López Vivar, conocida entre
los desheredados de Rubare, en la República Democrática del Congo, como
‘Mamá María’.
«Un día decidió entregar su vida al servicio de los olvidados, de los
pobres entre los pobres y allí, cumpliendo su misión de cuidar, ayudar y
auxiliar enfermos, en medio de un bombardeo, perdió las piernas, se
quedó bajo los escombros, sin poder casi respirar. El dolor era tan
fuerte que sentía que se iba, decía ‘Señor recíbeme’. Así me lo contó
ella después».
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