Ayer, día de 1 de octubre, renové los votos. Fue una celebración
sencilla, honda, muy sentida. Doy gracias por todos los que de alguna
manera me acompañastéis. Traigo la acción de gracias que leí al final de
la Eucaristía.
"Cada renovación supone pararse, entrar en lo más profundo, ahí donde Dios me habita para volver a decir SÍ. Sí al regalo recibido de la vocación, sí a seguir haciendo Reino contigo y como Tú y de hacerlo a través de las Hijas de Jesús, familia a la cual me siento totalmente perteneciente. Soy consciente que hoy mi SÍ, es mucho más real, incluso yo diría más auténtico. Gracias Señor porque a pesar de mis limitaciones y debilidades, te sigues fiando de mí, sigues apostando por mí, sigues creyendo en mí.
"Cada renovación supone pararse, entrar en lo más profundo, ahí donde Dios me habita para volver a decir SÍ. Sí al regalo recibido de la vocación, sí a seguir haciendo Reino contigo y como Tú y de hacerlo a través de las Hijas de Jesús, familia a la cual me siento totalmente perteneciente. Soy consciente que hoy mi SÍ, es mucho más real, incluso yo diría más auténtico. Gracias Señor porque a pesar de mis limitaciones y debilidades, te sigues fiando de mí, sigues apostando por mí, sigues creyendo en mí.
Gracias por tantas personas
que vas poniendo en mi camino: me vienen tantos nombres al corazón (mis
padres, hermanas, amigos/as, compañeros/as de camino, tantas personas
con las que he tenido y tengo oportunidad de compartir la vida,
ilusiones, sueños, dificultades… )
Renovar hoy en Pamplona tiene todo un sentido para mí pues toca mi vocación de Hija de Jesús. Ya que nuestra vida es para ir allí donde se nos necesite. Y, aunque me ha costado salir de Salamanca porque quiero a las personas con las que he tenido el regalo de compartir la vida; también tengo la certeza de que Dios me está acompañando en esta nueva etapa aquí en esta comunidad y en esta realidad. Hermanas gracias porque vuestras vidas desgastadas me hablan de Evangelio, de entrega, de fidelidad, de que seguir a Jesús merece la pena. Gracias Señor por la oportunidad y el regalo de estar en un colegio nuestro de las Hijas de Jesús, por los alumnos que pones en mi camino, por mis compañeros con los que cada día voy teniendo más confianza.
Renovar hoy en Pamplona tiene todo un sentido para mí pues toca mi vocación de Hija de Jesús. Ya que nuestra vida es para ir allí donde se nos necesite. Y, aunque me ha costado salir de Salamanca porque quiero a las personas con las que he tenido el regalo de compartir la vida; también tengo la certeza de que Dios me está acompañando en esta nueva etapa aquí en esta comunidad y en esta realidad. Hermanas gracias porque vuestras vidas desgastadas me hablan de Evangelio, de entrega, de fidelidad, de que seguir a Jesús merece la pena. Gracias Señor por la oportunidad y el regalo de estar en un colegio nuestro de las Hijas de Jesús, por los alumnos que pones en mi camino, por mis compañeros con los que cada día voy teniendo más confianza.
Gracias porque en los momentos de dificultad, ¡que los
hay!, ahí estás. Esos momentos en los que me invade una soledad
profunda, en los que ni a Ti te siento, ese ir contracorriente que a
veces se me hace cuesta arriba, ese no tener compañeras jóvenes que
quieran entregarse a ti… Gracias porque en esos momentos te haces el
encontradizo como sólo tú sabes hacerlo, a través de las personas, de
gestos, de detalles y de tu Palabra.Y por último gracias Señor porque, como dice una canción que a mí me gusta mucho:
Más allá de mis miedos y de mi inseguridad, quiero darte una respuesta Señor. "Aquí estoy para hacer tu voluntad y para que mi amor sea decirte si, hasta el final".
Naike FI
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